lunes, 30 de junio de 2008

Día después.


Tras la masiva e incontrolada ingesta de bebidas con un cierto contenido de alcohol, el día después está siendo malo, tirando a muy malo. Según he abierto los ojos, me he jurado a mí mismo, como tantas veces, que no lo vuelvo a hacer. Cierta sonrisa de satisfacción mitigada por un mal cuerpo de órdago. Boca pastosa. Estómago revuelto. En serio, no lo vuelvo a hacer. Ya sé que es mentira, pero es lo procedente.

Y es que con la edad, puedo dormir poco o beber mucho, pero no las dos cosas a la vez. Por eso ahora soy un fantasma que destila whisky por los poros y se va arrastrando. Como no todo va a ser tan lamentable como mi aspecto, el día –laboralmente hablando- está me está respetando hasta el momento. Mi tiempo de reacción cerebral tiende a infinito. Estoy medio cataléptico. Casi tengo que llamar a los bomberos para que me saquen de la cama. Después de la ducha... Épico.

Anoche, fue divertido. Nos dedicamos a abrazarnos con desconocidos, bailar, torear coches con banderas, mandar mensajes... De hecho casi la lío otra vez mandando a quien no debo. Varias confusiones. Medias lunas brillantes en el recuerdo. Generosidad a raudales, todo como si no costara. Bueno una vez cada 44 años, no está mal. A ver si pillo la siguiente Eurocopa.

viernes, 27 de junio de 2008

diálogo

Séneca: Qué tal todo ecgeson? Hace tiempo que ni lees ni escribes.
ecgeson: Muy liado con la crisis, el trabajo y todo eso. Cuando hay muchas oportunidades, se trabaja mucho. Cuando hay pocas, mucho más. No paro y es que no tengo tiempo para nada.
Séneca: Y para pensar?
ecgeson: Tampoco.
Séneca: Diría que te alegras. Casi ni te conozco.
ecgeson: Lo bueno del ser humano es que no puedes pensar dos cosas a la vez. Así que por dentro estoy más tranquilo, porque por fuera voy derrapando...
Séneca: Qué fue de tus estrellas perdidas, mudaznas, agobios y sinrazones?
ecgeson: Te confesaré un secreto. Todos los días tienen un minuto en que cierro los ojos y disfruto echándolas de menos...
Séneca: Ahora te reconozco un poco más...
ecgeson: Hay cosas que nunca cambian

lunes, 23 de junio de 2008

Tulipán negro

El fin de semana ha sido intenso. Muchas cosas. Debería de hablar de ellas, pero es que no puedo dejar de comentar lo de mi compañera de trabajo... Huele mal. Definitivamente. Muy mal.

Lo he notado con el verano, que ha llegado de facto, parece que para quedarse. Desde la semana pasada efluvios (y no de ámbar) me llegaban cuando estaba cerca. Como no había ocurrido previamente, pensé que podría atribuirse a una ovulación potente, cosa de 3 ó 4 días. Desde luego no es la adolescencia física. La dejó atrás hace un tiempecito. (La mental está en ello). El plazo venció, y los aromas persisten. Lo peor es que cada vez tengo menos resistencia, y me entran los siete males. Además si estamos viendo un tema, desatiendo y empiezo a analizar el asunto sin poder evitarlo... Mal vamos.

Si dejo un desodorante encima de la mesa, ¿lo pillará?

jueves, 19 de junio de 2008

Uno de los nuestos

Es inevitable.
Hay que comentarlo.
Estamos en crisis inmobiliaria, económica, petrolífera y moral.
Tras una temporada de rumores empezó el baile de nuevo. Han echado de la empresa a una compañera, y parece que mañana continuará la fiesta. Es tan fácil pensar: ¿seré yo? Porque podemos estar ahí... Aunque no merece la pena porque no está en nuestras manos...
El mundo de los rumores es exponencial... Empezaban con 1, luego 2 y al final de la mañana por lo menos 15... Y con cierto humor negro, todos nos dedicamos a hacer malévolas quinielas, de las que esperamos nos excluya el destino o el de recursos humanos...
Recuerda a las películas de la cosa nostra. Un día te sonríen y al día siguiente no formas parte de los "pata negra". Por sorpresa, de manera muy profesional. Limpia y efectiva. Mañana no vuelvas. Y la "omertá" se hace dueña del resto de compañeros.
Así que un Risto Mejide cualquiera te dice con buenas palabras y una sonrisa forzada de profesional, un juicio sobre tu trabajo poco edificante. Estás expulsado de la academia. No porque trabajes mal, sino porque no hay presupuesto. A protestar al maestro armero.
Así que un manto de tristeza o miedo invade los departamentos... Y las conversaciones y corrillos casuales caen en topicazos muchas veces ciertos.
En la guerra siempre mueren soldados, nunca los generales de los bellos discursos patrios. No sé porqué, pero apostaría pincho de tortilla y caña a que no caerá ningún director por inútil que sea...

lunes, 16 de junio de 2008

Antes de dormir

El halago debilita, la crítica fortalece; así reza un viejo adagio y repetía con nocturnidad un desaparecido cronista deportivo. En general estoy de acuerdo.

Hay algunas personas que cotidianamente nos animan enervan y desesperan pero son imprescindibles para ser nosotros mismos. Se nos olvida que están ahí, damos por hecho que es “lo normal”. Realmente pasamos por alto que somos unos privilegiados por poder contar con ellas sin pedirlo. Acabo de leer un correo y no me ha quedado más remedio que sonreír y dar gracias a Dios.

De oca a oca me asaltan en los recuerdos noctámbulos personas maravillosas que han pasado y pasan por mi vida: Familia, amigos, compañeros, alguna estrella perdida en un lejano mar… Me siento afortunado.Lo peor es que se me olvida a menudo.

Como ya el día está prácticamente vencido, voy a hacer(me) un buen propósito para mañana…

viernes, 13 de junio de 2008

Amapolas en Madrid


Hay un creativo japonés que ha inventado un perfume para la mujer urbana basado en una flor que no tiene aroma. Es Kenzo y la flor la amapola. Desde 1994 inunda ciudades con cientos o miles de amapolas, Londres, París y este año Madrid han sido las destinatarias del glamour bermejo oriental.

Y yo me pregunto: Primero: ¿quién lo paga? Segundo: Este tipo de ideas, como las sandías paralelepípedas, son formidables o una estupidez de alcance? Creo que hay una delgada línea que divide la genialidad de la frivolidad. Lo peor es que a veces no soy capaz de ubicarlaa....

miércoles, 11 de junio de 2008

Coversaciones circulares

Hay algunas cosas que me sacan de quicio: no tener criterio, los portazos, las conversaciones circulares... Y lo que más me saca de quicio es encontrarme a mí mismo haciendo lo que me saca de quicio...

Yo tuve un jefe que podía estar hablando horas, diciendo exactamente lo mismo... En serio. No se cansaba. Y si le interrumpías el discurso, vuelta la burra al trigo. Pensaba –inocente de mí- que cualquier emisor necesitaba mensajes de retroalimentación para comprobar que el canal estaba abierto y funcionaba correctamente. Comprobar que el receptor estaba ahí, atento. Frases como : “Me explico?, entiendes? verdad?” o incluso asentimientos con la mirada o con el rostro son necesarios para verificar que funciona la comunicación.

Visto lo pesado que era, un día me decidí a hacerme el muerto. Me hice pasar por un cadáver, con la mirada fija –los ojos cerrados me parecieron excesivos- en las rejas de ventilación que se veían a través de la ventana que tenía mi jefe a su espalda. Al principio me daba vergüenza, pero tenía que intentar acortar esas charlas...

Así que lo hice. El tipo empezó a hablar y yo seguía con mi táctica. Estaba convencido de que notaría que era excesivamente pesado y terminaría... Craso error. No se callaba. Diciendo lo mismo de manera diferente. De hecho yo no salía de mi asombro de cómo alguien podía estar tanto tiempo rajando así, sin más. Me sentía como un cubano ante un discurso de Fidel. Y seguía y seguía... Y yo haciéndome fuerte en mi postura de cartujo seglar...

Yo apostaba por mí y por mi silencio....
Perdí claramente.

Le tuve que decir que lo había pillado y que me ponía manos a la obra. Y aún me retuvo un rato, “aclarando conceptos”... Me juré que intentaría no ser tan pesado con nadie.

Hoy la memoria me ha traído este recuerdo tras asistir a una conversación circular sin fin de una compañera de trabajo... Infumable.

lunes, 9 de junio de 2008

Consumismo

Me seduce el capitalismo y/o consumismo. Cada vez más.

Todos sabemos el truco, reconocemos ese engaño, esta falacia. El hecho de llevar una camisa determinada, unas zapatillas exclusivas o un pantalón de marca, no nos hace mejores y mucho menos, felices. Sin embargo, compramos con unas ansias desmedidas, dignas de cualquier politoxicómano adicto a psicotrópicos variados.

No lo podemos remediar. Reiteradamente acudimos a esos centros comerciales que desdeñamos y compramos compulsivamente lo que no necesitamos. Creemos que nos va a hacer mejores o mucho más atractivos. ¿Es o no divertido? Bueno seguro que tú estás limpio de esa ponzoña, pero Las Rozas Village está lleno de gente que no va allí.

Por eso lo admiro. Sabemos cómo funciona y seguimos cayendo.


La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?
Proverbio chino

Deporte?

No entiendo cómo se puede ser cronista deportivo y decir que Nadal “humilla” a Federer. Qué ganas de sangre y sensacionalismo. Nadal ganó por amplio margen, pero no humillando a nadie, porque ni lo pretendía, ni lo hizo. Parece que es más victoria si hay humillación. Justamente lo contrario de lo que mostró, que fue un profundo respeto hacia un gran campeón.

De la misma manera, el día en que un español, Contador, gana el tour, la primera página de los dos diarios deportivos madrileños es el presunto fichaje de un jugador portugués de fútbol por parte del Real Madrid. Partidista y algo repugnante.

¿Por qué somos así?

Diálogo:

Ecgeson: Tengo un amigo que tiene un amigo, que
Séneca: Al lío....
Ecgeson: Conoció una sirena, se enamoró y la dejó marchar...
Séneca: Pero.. ¿ era de las sirenas de la ilíada, encantadora pero peligrosa porque arrojaba tu corazón hacia las rocas?
Ecgeson: Todo lo contrario, era una estrella, que le servía de guía para navegar cada día.
Séneca: No me lo creo
Ecgeson: Lo de la sirena?
Séneca: Que la dejara marchar.
Ecgeson: Ah eso! Ya lo decía el Cantar de Mío Cid: “Cosas veredes Mío Cid, que farán fablar las piedras”
Séneca: El mundo está lleno de aparentes sinsentidos y sobre todo de gente rara y además tonta. Eistein decía: “ Hay dos cosas infinitas. El universo y la estupidez humana. Y del universo no estoy seguro”
Ecgeson: Normal, normal, sólo quedamos los de siempre... ¿o no?
Séneca: Lo que hay que aguantar...

martes, 3 de junio de 2008

Revoltijo

Amo como ama el amor. No conozco otra razón para amar que amarte. ¿Qué quieres que te diga además de que te amo, si lo que quiero decirte es que te amo?

Pessoa

Todos los días tengo por costumbre enviar una frase del día. La de hoy ha sido ésta. Intento buscar correlación con mi estado de ánimo o mi día a día. Hoy mi cabeza es un surtidor de ideas sueltas o deslabazadas. No hay un hilo conductor.
Día doloroso el de ayer. No me entiendo ni yo...

Ayer entré en un blog que me resultó curioso. Un tipo que vive en un bajo con terraza, fotografía la basura que le arrojan sus congéneres o vecinos rastreando su origen y describiéndola. Lleva más de un año haciéndolo y por supuesto con varias líneas de investigación abiertas.

Confieso que entré en más de un blog. Una de las cosas que me llamó la atención es lo felices que están(estamos) de haberse conocido la mayoría. Muy seguros de nosotros mismos... Cuando queda tanto por aprender...

Echo de menos quedar con amigos y tener conversaciones algo emocionales, más allá de tertulias político-económicas: crisis inmobiliaria (40% menos de escrituraciones este mes de mayo respecto al mismo del año pasado), alzas del barril de petróleo (el récord a 135€ hace dos semanas) o crisis global (24% menos de matriculaciones de vehículos en el mes de mayo respecto al mayo de 2007). Demasiado agobio laboral.

Me gustó una canción de Juanes, (será la educación judeo-cristiana castrante con complejo de culpa...). Se llama “No creo en el Jamás” .
Cuando la vida ma da golpes
y me manda para el suelo
es cuando yo más siento
que tengo que levantarme
que dar la cara al miedo
es una forma de vencerlo
No voy a darme por vencido
no voy a darle mi vida al miedo
el miedo es un asesino
que mata los sentimientos
y se que no estoy solo
yo se que Dios esta aqui adentro
Y necesito silencio
para poder encontrar
mi propia voz y mi verdad
y al final de la oscuridad
no me siento solo
se que estas conmigo
Hoy voy a levantarme
y no me voy a resignar
mi corazón
a ser lo que no quise y no pude
no lo voy a aceptar ,
hoy voy a buscar estar mejor
la vida tiene solución
aquí no hay nada imposible
no creo en el jamás
no creo en el jamás
Si darse por vencido
es una forma de morir
entonces yo jamás
le quiero dar gusto a la muerte
pienso en mi familia
y el corazón late mas fuerte
que no se puede vivir
pensando que se va a morir
vivir sin soñar es tanto
como morir estando vivo
yo creo en el presente
Y necesito silencio
para poder encontrar
mi propia verdad
y al final de la oscuridad
no me siento solo
se que estas conmigo
Hoy voy a levantarme
y no me voy a resignar
mi corazón
a ser lo que quise y no pude
no lo voy a aceptar,
hoy voy a buscar estar mejor
la vida tiene solución
aquí no hay nada imposible
no creo en el jamás
no creo en el jamás