Pues aquí estamos en pleno hundimiento laboral y actuando a lo romántico, como la orquesta del Titanic.
Percibimos en la distancia los gritos y la zarabanda del resto de la tripulación:” Que nos hundimos. Que nos vamos al infierno derechos. Que nos van a tirar por la borda con 20 días... Que no hay sitio ya para todos....” Y nosotros –impasible el ademán- seguimos programando reuniones, actas, informes, proyectos no sé si por inconsciencia, por estupidez o por quijotes. A ver si viene un Sancho Panza que nos diga que no son gigantes sino molinos y no rumores sino despidos...
Percibimos en la distancia los gritos y la zarabanda del resto de la tripulación:” Que nos hundimos. Que nos vamos al infierno derechos. Que nos van a tirar por la borda con 20 días... Que no hay sitio ya para todos....” Y nosotros –impasible el ademán- seguimos programando reuniones, actas, informes, proyectos no sé si por inconsciencia, por estupidez o por quijotes. A ver si viene un Sancho Panza que nos diga que no son gigantes sino molinos y no rumores sino despidos...
Yo estoy apretando los esfínteres y rezando hasta en latín para aguantar hasta el día uno de julio. Viendo como jarreaba, me hice un seguro nómina que sólo tiene vigor si sigo contratado hasta ese día... Espero que la maldición del Atlético (nadar, nadar para morir en la orilla) no se haga presente en estos cuatro días que quedan...