jueves, 13 de diciembre de 2007

Sobre el trabajo

Llevo una temporada acuciado, casi podría decir acosado, por el trabajo. Parece que el movimiento rotatorio de la tierra sobre su propio eje depende de que la rentabilidad del proyecto supere el 20%. Pero he llegado a la secreta convicción de que no es así. Todos los indicios apuntan a que no depende de mi esfuerzo, ni a la viabilidad de los proyectos así que mi espíritu está tranquilo sabiendo que no estoy poniendo en riesgo el porvenir de la humanidad. (Bueno al margen del calentamiento y cambio climático, en el que tengo mi cuota de responsabilidad)

No pretendo ser un rancio moralista (aunque parece que no puedo dejar de serlo) con este exordio, pero tampoco abogo por el carpe diem de la oda de Horacio. Ni todas estas historias blanditas, edulcoradas y lacrimógenas de muchas conversaciones y presentaciones de power point. Considero que el trabajo puede llegar a ser un ámbito más del desarrollo humano.

En España era y es considerado una maldición. De hecho los hidalgos (hijos de algo) debido a su linaje, no debían trabajar. Esta filosofía que aún perdura es lo que nos hace ser refractarios al espíritu emprendedor, a la admiración hacia personas luchadoras y empresarios. Colón no buscó una nueva ruta hacia las Indias en respuesta a una directiva elegida mayoritariamente, como dijo Milton Friedman

Al igual que hay gente que sabe jugar al ajedrez mejor, y ésto nos parece razonablemente bien o normal, no somos capaces de admitir que hay personas que saben ganar dinero de una manera más eficaz que otros. Son más hábiles, tienen una capacidad superior, que en vez de admirar (como a los raúles, gasoles o alonsos de turno), denostamos. Esta ralea de individuos, es la que genera riqueza, empleo y estabilidad. Y por supuesto, muchos más ingresos para ellos. Pero ¿por qué si el dinero no da la felicidad nos parece tan oprobioso?

El trabajo es un elemento más del conjunto de la vida. Habrá que intentar disfrutarlo en la medida en que se pueda. Es necesaria una buena actitud. Cuando alguien te responde “De lunes” está claro que su vida se limita al fin de semana y medio viernes. A vivir 2,5 días de cada 7, a no vivir. Me divierta un locutor que siempre dice: “ Por fin las 8 del lunes. Ya pasó el fin de semana. Los chinos llevan 5 horas trabajando.” Genial, ¿no?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es difícil comentar un texto, cuando has de leerlo un par de veces para entender su significado.
Palabras unidas en un momento determinado que expresan una actitud un sentimiento o una circunstancia.
La responsabilidad de cada uno nos hace vivir el trabajo de una forma diferente, es difícil encontrar las palabras adecuadas para apoyar a un compañero, a un amigo, cuando ves que su barca da vueltas sobre si misma a pesar de estar utilizando correctamente lo remos, le daría el motor, el más potente para que llegará fácilmente a la orilla, pero no puedo.
Hay personas que viven para trabajar, otras trabajan para vivir, da igual siempre que sea suya la elección.
Si algo bueno tiene mi trabajo es que he encontrado parte de mis mejores amigos en él. Y sé que a pesar de decir “De lunes” será un lunes estupendo, compartir parte de mi tiempo con personas que me hacen reir, reflexionar, aprender y sobre todo ser mejor persona es un tesoro que poca gente encuentra en su trabajo.
No sé como puedo ayudarte, lástima………..