viernes, 3 de abril de 2009

Excursión nocturna

Ayer fuimos a la “cena del buen rollo”. Compañeros de trabajo del departamento para paliar los efectos psicológicos devastadores de la crisis. Motivación interior. La intención parece buena, pero había lagunas; dos días antes habían expulsado a un par de compañeros. La iniciativa venía impulsada por directores –es decir muy poca espontaneidad- y nos juntamos allí unos cuantos feaks de distinto pelaje... Que había que vernos por Huertas...

Cada uno con sus historias. Yo uno más, muy metido en el papel. Lo más divertido fue, tras la sobremesa, cuando la directora nos reparte papelitos con pequeñas consignas budistas de liberación interior que tenemos que leer y comentar. Como ella se está separando por segunda vez, todo estaba sacado de un libro de autoayuda profundo y espectacular... A mí me parecía todo un experimento. Según se iban desarrollando los acontecimientos y las opiniones, pensé lo mismo que el Conde de Romanones: ¡¡¡Joder que tropa!!!!
Además coincidión con unos mensajes y una breve conversación nocturna emotiva; me hubiera gustado poder teletransportarme para poder dar un abrazo de energía y ánimo a una de las personas más luchadoras que conozco. Bueno, no sé si lo necesitaba, pero a mí me apetecía. A cambio me quedé en freakilandia...

1 comentario:

Thedarksunrise dijo...

Consignas budistas de liberación interior?.. Casi mejor que se las hubiese dado a los despedidos :( Besiss